La cara, parte frontal de la cabeza expuesta al mundo. Con más de 30 músculos confeccionando las partes a través de diversas funciones operando acorde al propósito y la labor de la zona, así como finos y pequeños son los responsables de elevar la comisura de los labios y de mayor dureza en las mejillas. Siendo cada faz, al mismo tiempo, única en su forma. Confiriendo la identidad humana, en el reconocimiento y la diferenciación del resto, en los ojos egipciamente almendrados, los dientes torcidos, las cejas perfiladas, las orejas grandes, las frentes pequeñas...

Un rostro, una impresión y un juicio...

...refutado en el tribunal de los pensamientos que no se ven, aquellos pensamientos que inyectan una emoción profunda y templada sobre uno mismo y abren las puertas del templo de las experiencias más personales e impactantes, aquellas que más que formar un rostro forjan un alma. Recordando de donde venimos, quienes somos.

"La acusación: ¿Dónde está la clave de vuestro templo?

La defensa: En una caja de huesos, cubierta de rugoso pelo.

La acusación: Decid las características de esa caja.

Defensa: Mi cabeza es la caja, mis dientes son los huesos, mis cabellos son el pelo, mi lengua es la llave."

Decreto ley sobre el derecho a la intimidad que ningún gobierno ni persona podrá jamás poseer: la naturaleza de los profundos pensamientos que no se pueden leer.